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El Centro de Práctica de Gerópolis es una iniciativa que nació en el año 2017 con el objetivo de aportar a la formación de los estudiantes en temáticas relacionadas con el envejecimiento. La propuesta fue creada gracias a la solicitud de un estudiante de pregrado de la carrera de Medicina de la Universidad de Chile, quien estaba interesado en realizar su internado electivo en la institución debido al trabajo que ya se venía implementando con la población mayor de Valparaíso.

Desde ese momento se diseñó un programa para que los estudiantes pudiesen cursar sus prácticas en el centro, enfocado en la contribución a los procesos formativos asociados a las temáticas de vejez, envejecimiento y personas mayores. El año 2018 se sumaron las carreras de Fonoaudiología, Trabajo Social y Psicología.

Carlos Varas, actual jefe de carrera de Psicología, recuerda los primeros años de trabajo, destacando el importante rol de la vinculación: “Hemos accedido a distintos tipos de agrupaciones que trabajan y colaboran en torno a la temática. Existen muchas experiencias positivas, en las que los estudiantes han podido conocer historias de vida de diversas personas mayores. El poder de conectarse con esta sabiduría es fundamental en su proceso formativo como profesionales”.

Uno de los elementos que se destaca en estos encuentros es la vinculación intergeneracional, la que responde de manera directa a las políticas de la Vinculación con el Medio que establece la Universidad de Valparaíso. Esta especie de “círculo virtuoso”, como lo define Carlos Lara, vicerrector de Vinculación con el Medio de la institución, cumple con uno de los objetivos fundamentales en la generación de diálogos entre la institución y las comunidades colaboradoras de Gerópolis.

“Hemos establecido un modelo basado en una condición bidireccional, en que el impacto se mide dentro de dos variables. Una es el grado de satisfacción del público objetivo y otra basada en los aprendizajes que la institución obtiene de esas actividades de vinculación. Ese círculo virtuoso es un retorno al aula, en que se pueden implementar nuevos procesos formativos o administrativos”, explicó el vicerrector. 

Estos objetivos fueron consolidados de manera oficial el año 2022 mediante un decreto otorgado por la Universidad, donde se reconoce al Centro Gerópolis como campo clínico interno para albergar prácticas profesionales, curriculares, internas o pasantías de estudiantes de la Universidad de Valparaíso o de otras unidades.

Transformando la formación académica

El diseño de las pautas de evaluación que se aplican a los estudiantes en las instancias de formación mencionadas anteriormente se desprende de los comités curriculares de las diferentes carreras, a través de una planificación consensuada entre diferentes profesores. Estas tienen como objetivo establecer puntos en común asociados al perfil de egreso de cada carrera. Un ejemplo destacable es el trabajo realizado por Alondra Castillo y Cristina Carmona, profesoras de la Escuela de Fonoaudiología, quienes han estado vinculadas al centro desde sus comienzos.

“En el contexto de trabajo comunitario, no concebimos la rotulación de diagnósticos, sino más bien nos enfocamos en la salud emocional, física y social. En este sentido, la fonoaudiología se integra a este enfoque más holístico del trabajo con personas mayores. Hemos establecido acuerdos para dirigir los lineamientos desde la escuela y en concordancia con elementos fundamentales, como el buen trato hacía las personas mayores”, contextualiza Alondra Castillo.

Además del trabajo de intervención comunitaria, los estudiantes realizan seminarios de profundización teórica, en los que planifican actividades y crean material de apoyo acorde a cada taller. Otro aspecto fundamental en este proceso de evaluación es el trabajo en equipo, ya que gran parte de las prácticas se realizan en duplas o grupos de estudiantes.

En cuanto a los objetivos de formación del Centro Gerópolis, Javiera Basáez, encargada de Vinculación, explica: “Desarrollamos una encuesta, antes y después del proceso formativo, además de aplicar una evaluación de procesos de carácter interno. Al finalizar la práctica se realiza una evaluación general en conjunto con los estudiantes de diferentes carreras, con un carácter más institucional, abordada desde la experiencia. Esto se suma a una evaluación individual, en la que se mide lo que el estudiante siente y cree respecto a la vejez, envejecimiento y personas mayores buscando reconocer cambios de actitudes”.

Hasta la fecha, son alrededor de seiscientos estudiantes de diferentes instituciones académicas los que han realizado sus procesos formativos en el centro, permitiendo una vinculación directa con más de veinte unidades académicas en los últimos siete años. “Hemos abierto camino y espacio a carreras que incluso no tenían muy claro cómo contribuir a la temática y que hoy son agentes de cambio en este proceso. Algunas de ellas son Ingeniería en Informática, Ingeniería en Construcción e Ingeniería Civil Industrial”, señala Francisco Serrano, académico de la Escuela de Tecnología Médica y miembro del equipo ejecutivo de Gerópolis.

Avanzando hacía una política inclusiva

El carácter profesionalizante de estos procesos formativos ha llevado a Gerópolis a impulsar nuevas estrategias de sistematización asociadas a protocolos, inducciones, seguimientos y evaluaciones, las cuales se podrían aplicar a nivel institucional a largo plazo. Estas herramientas se proponen con la finalidad de generar conciencia en torno a los edadismos que se manifiestan de manera diaria en diferentes espacios, siendo una problemática que cruza generaciones de manera transversal.

Es así como este lunes 29 de mayo se da inicio, de manera oficial, a la asignatura interdisciplinaria de prácticas vivenciales con personas mayores en estudiantes de pregrado de la Universidad de Valparaíso Impacto sobre el Cambio de Actitudes hacia las Personas Mayores, iniciativa seleccionada en el marco del V Concurso de Investigación en Educación en Ciencias de la Salud de Asofamech (Asociación de las Facultades de Medicina de Chile).

El objetivo principal del proyecto es aportar al desarrollo de la investigación dentro de las exigencias de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), asegurando la calidad de los programas de formación de profesionales en el pregrado. La dirección del proyecto está a cargo del doctor Cristian Papuzinski, jefe de carrera de Medicina (casa central), junto a los académicos Marcelo Arancibia, Mariane Lutz, Claudia Angulo y Viviana García, además de Nelly Pérez (médica geriatra del Hospital Carlos Van Buren) y Javiera Basáez.

“El programa de práctica que iniciamos este lunes 29, de carácter interdisciplinario, permitirá que estudiantes de las carreras de Psicología, Trabajo Social, Fonoaudiología, Medicina y Sociología inicialmente conformen equipos de trabajo y revisen contenidos fundamentales para desempeñarse con personas mayores de manera integral; también que se vinculen a ellas en el territorio y puedan vivenciar, con ellas, cómo es desenvolverse en su entorno a través del uso de trajes de simulación de envejecimiento.  Durante todo este proceso serán acompañados por un equipo académico conformado por docentes de las unidades académicas y del propio centro”, explica Viviana García, académica de la Escuela de Fonoaudiología y directora ejecutiva del Centro Gerópolis.

Hace unas semanas se realizó la jornada de prueba del “gerotraje” en el Edificio Blas Cuevas. En esta sesión, los encargados del proyecto implementaron una prueba de simulación con Kensel Salinas, estudiante de la carrera de Fonoaudiología. Durante el recorrido, se visitaron los diferentes espacios por donde las personas mayores se desplazan semanalmente para asistir a los diversos talleres y actividades.